Desde la Fundación Generación Diferente, un grupo de jóvenes comprometidos de nuestra universidad, ha llevado a cabo una iniciativa transformadora. Su proyecto, titulado “Estrategia de Desarrollo de Capacidades frente al Consumo de Sustancias Psicoactivas (SPA)”, se enfoca en fortalecer los factores protectores en niños, niñas y adolescentes de 9 a 15 años.
Objetivos del Proyecto:
- Fortalecimiento Socioemocional y Espiritual:
- A través de un programa pedagógico basado en juegos cooperativos, los estudiantes han trabajado en el desarrollo de habilidades como el afrontamiento, la empatía y la inteligencia emocional. Estas capacidades son esenciales para enfrentar los desafíos emocionales que afectan a nuestra juventud.
- Promoción de una Crianza Asertiva:
- Los padres y cuidadores también son parte fundamental del proyecto. Se les ha brindado herramientas para manejar el estrés, fomentar la resiliencia y prevenir el consumo de SPA en sus hogares. La psi-coeducación se ha convertido en un puente vital entre generaciones.
El Taller “Mentes Fuertes, Familias Sanas”:
En una actividad reciente, los estudiantes organizaron el “Taller Mentes Fuertes, Familias Sanas”. En este taller, se creó un “botiquín emocional” con jóvenes de 9 a 15 años. ¿En qué consistió?
- El Botiquín Emocional:
- Cada elemento en el botiquín simbolizaba una emoción. Curitas representaban la calma, cápsulas el amor y el alcohol el perdón. A través de esta metáfora, los jóvenes aprendieron a reconocer y gestionar sus emociones.
- Las pautas obtenidas son cruciales para enfrentar problemas emocionales y psicológicos, como la ira, la ansiedad o la depresión. El mensaje es claro: hay soluciones y apoyo disponibles.
- Prevención del Suicidio:
- El botiquín emocional también aborda una problemática urgente: el suicidio. Al proporcionar herramientas para el bienestar emocional, estos estudiantes están contribuyendo a la salud mental de nuestra sociedad.





La Necesidad Identificada en la Comunidad:
La Fundación Generación Diferente realiza una labor de acompañamiento, apoyo y orientación a las familias y participantes de cada zona de impacto. Esta población infantil enfrenta factores de riesgo relacionados con el consumo de sustancias psicoactivas, como la presión social, el acceso fácil y la curiosidad por experimentar. Además, muchos de ellos habitan en entornos vulnerables donde las drogas, tanto lícitas como ilícitas, forman parte de la cotidianidad.
Mediante esta estrategia, se busca:
- Brindar alternativas y estrategias preventivas para fortalecer factores protectores, como la autoestima y las relaciones positivas con Dios y los demás.
- Promover la práctica de valores y el desarrollo de habilidades sociales en un entorno familiar seguro.
- Facilitar espacios libres de drogas que permitan la construcción de una imagen positiva y un proyecto de vida sólido.
En resumen, estos jóvenes están transformando la autoimagen de los niños y adolescentes, así como la visión de su entorno, al ofrecer soluciones concretas para prevenir el consumo de sustancias psicoactivas.